Cobertura natural para macetas y contenedores
Desde su lanzamiento al mercado en 2014, el “mantillo para contenedor” se ha convertido en un recurso indispensable para numerosos viveros. El mantillo para contenedor es una cobertura respetuosa con el medio ambiente para prevenir el crecimiento de algas y malas hierbas. Está hecho de madera de conífera de bosques de gestión sostenible (con certificado PEFC). La madera se ha tratado térmicamente para evitar riesgos fitosanitarios.
El mantillo para contenedor se seca rápidamente, es permeable al agua y rompe las gotas de agua, de modo que la capa superior deja pasar el aire. Esto hace más difícil el crecimiento de algas, musgos y malas hierbas. Al emplear mantillo para contenedor, la humedad del sustrato se mantiene más homogénea y las plantas también tienen un aspecto visualmente atractivo para su comercialización.
El mantillo para contenedor se puede procesar mecánicamente con todos los esparcidores automáticos y también es muy apropiado para acolchar camas de plantación. El mantillo para contenedor está disponible en sacos de 70 litros y suelto a granel.
- Excelente prevención de musgo y malas hierbas
- Óptima cobertura (propiedades adhesivas)
- Mantiene húmedo el sustrato
- Mermas muy bajas causadas por el viento o durante el transporte
- Aspecto natural
- Hecho con madera fresca de conífera sin corteza (2 – 10 mm)
- Seguro para los cultivos; intenso tratamiento térmico durante el proceso de producción
- De bosques de gestión sostenible (PEFC)
- Contiene pigmentos minerales naturales seguros para las plantas y el medio ambiente
- El proceso de producción está certificado conforme a las normas RHP e ISO 14001
- Permeable al agua, de secado rápido
- Disponible a granel, en balas grandes, o en sacos de 70 litros
Cómo usar óptimamente el mantillo para contenedor
Asegúrese de que las macetas están cubiertas con una capa de mantillo para contenedor de al menos 1,5 cm, dependiendo del tamaño de la maceta. Que este proceso lo realice personal cualificado ayuda a asegurar una excelente prevención de las malas hierbas.
Tras la aplicación, hay que regar a fondo las plantas para asegurarse de que la capa de mantillo se une adecuadamente y de que se mantiene en su lugar a pesar del viento o incluso si se cae la maceta.
El uso de mantillo para contenedor reduce la evaporación del sustrato. Esto significa que hay que ajustar la frecuencia y la cantidad de agua aportada para prevenir un exceso de riego. En el caso particular de sustratos pesados y densos hay que reducir la frecuencia de riego para asegurarse de que el sustrato tiene drenaje y ventilación suficientes.
Para una óptima prevención de las malas hierbas, hay que dejar secar el mantillo para contenedor después de cada riego. Esto asegurará una capa de cobertura estable y seca, lo que reduce la germinación de malas hierbas. Por lo tanto, se recomienda específicamente una buena ventilación para alcanzar los mejores resultados, especialmente en invernaderos y túneles de polietileno.
Como el mantillo para contenedor reduce la cantidad de sustrato de la maceta en una capa de 1,5 – 2,5 cm, hay que reducir la fertilización del sustrato de acuerdo con ello. La cantidad de fertilizante de base y/o de fertilizante de liberación controlada en el sustrato debe elevarse con el fin de mantener un nivel similar de nutrición por maceta.