Restauración de zonas de turbera con musgos esfagnáceos – Innovación para la protección del clima y de la biodiversidad
Turberas y rehumidificación
La mayoría de las zonas de turbera alemanas ya no se encuentran en estado natural, debido a la intervención humana. En contraste con su función originaria como sumideros de carbono, estas zonas de Alemania liberan actualmente 43,8 millones de toneladas de CO2 equivalente (CO2) al año. Eso se corresponde con el 4,6 % de las emisiones alemanas de gases de efecto invernadero1. En Baja Sajonia, solo las zonas de turbera constituyen en torno al 12,7 % de las emisiones totales. La extracción y utilización de turba solo representa una pequeña porción de estas emisiones de gases de efecto invernadero. En Baja Sajonia son responsables del 1,7 % de las emisiones1; a escala nacional, la cifra es tan solo un 0,2 %2.
Para restaurar a su estado natural las turberas degradadas –una vez que ha cesado la extracción de la turba, por ejemplo – las zonas normalmente se
rehumidifican y se deja que el proceso natural de colonización siga su curso. Esto a menudo puede tardar décadas o, en muchos casos, ni siquiera sucede.
Aparte de la ausencia de potencial germinativo, más de la mitad de todas las zonas rehumidificadas están demasiado secas o demasiado húmedas y, como resultado, hay pocas perspectivas de que vuelvan a ser turberas vivas. Es improbable que las especies más típicas de la turbera, como los musgos esfagnáceos formadores de turba y otras plantas vasculares típicas, como la Rhynchospora alba, se establezcan por sí solas. Las zonas seminaturales rehumidificadas siguen siendo fuentes de gases de efecto invernadero; en 2013 emitieron 193.000 toneladas de CO2 equivalente en Baja Sajonia3.
Restauración de turberas
La restauración de turberas degradadas puede acelerarse introduciendo vegetación típica de turbera alta, como los musgos formadores de turba (Sphagnum spp.), y con técnicas de gestión de agua cuidadosamente adaptadas.
Este innovador proceso puede ayudar a establecer una vegetación típica de turbera y conseguir efectos climáticos positivos al menos 30 años antes que si se emplean métodos de rehumidificación tradicionales. Los servicios ecosistémicos resultantes pueden ser evaluados y pueden dar derecho a recibir una compensación en forma de ecopuntos (Alemania) o de certificados climáticos.
Servicios ecosistémicos
Restaurar las turberas degradadas con musgo esfagnáceo estimula el asentamiento de flora y fauna típicas de turbera y el reestablecimiento acelerado de biotopos raros y protegidos.
Cuál es nuestro procedimiento y qué ventajas tiene
- Evaluación hidrológica de la zona y preparación profesional del lugar
- Aseguramiento de irrigación y mantenimiento óptimos de estas áreas
- Cosecha de musgo de nuestro propio banco de musgo de turbera o reproducción sostenible en un invernadero
- Colocación de fragmentos de musgo de turbera y vegetación de acompañamiento en los lugares apropiados
- Cobertura de varios tipos de musgo de turbera en un corto periodo de tiempo
Además, como los veranos son cada vez más secos, la restauración de turbera desempeñará un papel clave en la prevención de incendios.
- Preservación del cuerpo de la turbera
- Prevención de la descomposición de la turba
- Creación de un sumidero de carbono
- Establecimiento, en 5 años, de zonas de musgo de turbera climáticamente neutras, 35 años antes de lo que permiten las técnicas actuales
- Reducción de 175 t de CO2 por hectárea durante al menos 35 años (lo que equivale a la captura de CO2 de 1.750 árboles)
- Menores emisiones de metano, dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero
Creación de hábitats para especies amenazadas y protegidas, como:
- Territorios de caza para anfibios (p. ej. rana campestre)
- Zonas de cría para aves que anidan en el suelo (p. ej. avefría europea)
- Entornos para muchas especies de insectos y arañas
- Plantas productoras de néctar para mariposas (p. ej. la niña hocecillas)
- Incremento inmediato de la biodiversidad de la vegetación típica de turbera (p. ej. drosera y hierba algodonera)
Inóculos de musgo de turbera
Como los hábitats de turbera prístina escasean en Alemania, uno de los principales problemas reside en obtener material de base para inoculación. Klasmann-Deilmann cultiva musgos de turbera protegidos en su propio banco de musgo de turbera (terreno a cielo abierto) y empleando musgo de turbera cultivado en un entorno de invernadero.
Esto significa que ya no necesitamos acceder a zonas de turbera naturales o seminaturales para obtener inóculos. Se pueden suministrar especies individuales o una mezcla de especies, en función de lo que desee el cliente. También es posible propagar variedades regionales de musgo de turbera para requisitos específicos.
- Cultivo a cielo abierto de turbera alta
- Se dispone de siete especies de musgo de turbera
- Los terrenos están colonizados directamente por flora y fauna (hasta 40 especies de plantas, normalmente las típicas de turbera alta, más una variedad de especies de insectos y arañas)
- Se dispone de siete especies de Sphagnum (musgo de turbera)
- Propagación dirigida en invernadero de especies nativas de origen local
- Musgo Sphagnum puro sin flora ni fauna no deseadas
- Las plantas se establecen rápidamente, ya que han sido precultivadas
- Sin intervención que afecte a turberas naturales
Nuestros servicios de un vistazo
- Asesoramiento sobre opciones de financiación, planificación territorial y gestión del agua
- Completa implementación y mantenimiento de nuevos planes de desarrollo territorial
- Suministro de musgos esfagnáceos formadores de turba a partir de diversas fuentes
Bibliografía
1Ministerio de Medio Ambiente, Energía y Protección Climática de Baja Sajonia (2016). Programm Niedersächsische Moorlandschaften – Grundlagen, Ziele, Umsetzung (Programa para las turberas de Baja Sajonia – Fundamentos, objetivos, implementación), p. 9, 32
2Oficina Federal de Medio Ambiente (2014). Reportaje dentro de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y el Protocolo de Kyoto 2014. – Nationaler Inventarbericht zum Deutschen Treibhausgasinventar 1990-2012 (Informe del Inventario Nacional sobre el Inventario Alemán de Gases de Efecto Invernadero 1990-2012) – Cambio Climático 24/2014, p. 847
3Höper, Heinrich (2015). Treibhausgasemissionen aus Mooren und Möglichkeiten der Verringerung (Emisiones de gases de efecto invernadero de las turberas y formas de reducirlas), TELMA Beiheft 5, p. 146